Esta receta es una auténtica delicicia, que calmará a los más chicos las ganas de comer helados y a nosotros nos dará la tranquilidad de alimentarlos bien al tiempo que les calmamos sus antojos. Es una preparación muy fácil y sencilla, que puedes variar a tu gusto con las frutas e ingredientes de tu preferencia, para siempre sorprender y deleitar a la familia con los más sanos y deliciosos helados 🙂